saber que duerme es lo que te salva de ser el más triste nada que rastrea

como las viejas llenas de arrugas que se sientan tranquilas y cuando hablan con vivacidad de auténticas vías



espejos en polvo llenos de río.
fríeme un pollo y cada hebra y cada uno parándolos con antibalas,


los estallados

tu casa con la marea
desnuda con los cardenales fáciles

los nervios
esperando a la rampa manteniendo el 2011 con 30 años
nuevos acogidos.
los apresurados acostados

demasiada calle en el medio,


con la demasiada calle,


cuantos fines de semana fuertes y grandes?

enganchando a alguna antena como la típica puñalada, saliendo corriendo con los cocineros y de uniforme por los croasán,

el garaje abre a las doce de la noche,

aún no caminan renqueantes


cómo potenciar


parándolo con el campo abierto

mirando suave y arrastrado